TEXTO EXPOSITIVO “EL PARTE DE CONDUCTA”

EL PARTE DE CONDUCTA

El parte de conducta es una sanción que establecen los centros escolares como medida disciplinaria ante un comportamiento inadecuado de los alumnos. Los motivos por los que un centro puede imponer un parte de conducta a un alumno son varios: hábito agresivo (insultos, amenazas…) con otros compañeros o el profesorado, peleas, maltrato del mobiliario, faltas de asistencia injustificadas, acoso, etc.

Existen dos tipos de grados (I y II) a la hora de poner un parte atendiendo al tipo de conducta disruptiva que se haya llevado a cabo. Por un lado, tenemos las sanciones que responden a un “grado I”, por ejemplo, “la sistemática falta de realización por parte del alumnado de las actividades educativas orientadas al desarrollo del currículo”, “la exhibición de un dispositivo electrónico en el centro” o “cualquier acto que perturbe el normal desarrollo de la actividad del centro docente, especialmente de los procesos de enseñanza-aprendizaje”

Por otro lado, los partes de grado II conllevan una sanción mayor dado que entrañan un agravamiento en la conducta del alumno. Concretamente, en el Reglamento de Régimen Interno (RRI) se contemplan conductas del siguiente tipo: “Causar pequeños daños, deterioro no grave, intencionado o por manejo negligente, en el material o en las instalaciones del centro o en las pertenencias de los demás miembros de la comunidad educativa (pintar, rayar, etc).” o “actos de indisciplina, injurias u ofensas graves de palabra u obra contra miembros de la comunidad educativa y especialmente aquellos que contengan connotaciones racistas, xenófobas, sexistas, ideológicas o religiosas.

¿Cómo debe proceder el docente? 

El docente deberá, en primer lugar, notificar al alumno la correspondiente sanción. Después redactará el informe indicando la fecha, hora y lugar del incidente y posteriormente lo describirá. Por último, depositará el parte de conducta en la bandeja de secretaría para que sea enviado al domicilio del alumno sancionado. 

En definitiva, a través de este proceso de registro de conductas en el ámbito educativo, no solo se espera que el alumno cambie su comportamiento, sino también que contribuya a mejorar el bienestar del centro. 

 

Texto expositivo para trabajar sus características más relevantes:

  • ¿Por qué se trata de un texto expositivo?
  • ¿Cuál es su estructura?
  • ¿Cómo es su lenguaje? ¿Aparecen tecnicismos? Señálalos.
  • ¿Está dirigido a un público especializado o divulgativo? ¿Por qué?
  • ¿Qué recursos propios del texto expositivo podemos encontrar? (descripciones, definiciones, enumeraciones, preguntas-respuesta, secuencias cronológicas, ejemplos, etc).

 

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *